Taguas, patos, garzas, cisnes y el llamativo siete colores, son algunas de las especies que se pueden avistar en el Humedal Laguna de Batuco, que desde el año 2021 es Santuario de la Naturaleza en la Región Metropolitana, permitiendo que 274 hectáreas del espejo de agua queden bajo protección oficial de Estado de Chile y resguardado por la Fundación.

Este lugar fue el escenario escogido por el subsecretario del Medio Ambiente, Maximiliano Proaño para anunciar la nueva Norma Lumínica elaborada por el MMA, tras realizar una jornada de avistamiento de aves en el Santuario.

En la oportunidad, la autoridad ambiental fue acompañado por Ivo Tejeda, director ejecutivo de la Red de Observadores de Aves (ROC), Raúl Perry, gerente Programas Fundación San Carlos de Maipo, Giordano Delpin, Delegado Presidencial Provincial de Chacabuco y Sonia Reyes, Seremi del Medio Ambiente RM.

La norma lumínica vigente solo protege la observación astronómica en algunas regiones, en cambio esta nueva norma, amplia la protección a todo el territorio nacional e incorpora a la biodiversidad, estableciéndose exigencias específicas para las Áreas de Protección Especial (áreas de protección de biodiversidad y áreas de protección astronómica).

En este sentido, el subsecretario del Medio Ambiente, Maximiliano Proaño, manifestó que “esta iniciativa se alinea con nuestra visión sobre conservación y protección de la biodiversidad, junto a la educación y sensibilización ciudadana en esta materia. Se ha determinado que actualmente en nuestro país existen al menos 17 especies afectadas por la contaminación lumínica y con esta normativa buscamos mitigar esos efectos”.

La nueva normativa regula la temperatura de color de las ampolletas (bajo parámetros de luz fía y luz cálida) para proteger la biodiversidad y la salud humana. Según la evidencia, la luz blanca tiende a confundir a las aves, provocando caídas y accidentes.

Hay que indicar que la contaminación lumínica es generada por el alumbrado de exteriores y se encuentra regulada en Chile desde el año 1998, mediante la Norma de Emisión para la Regulación de la Contaminación Lumínica, texto que será reemplazado por la nueva normativa que está a la espera de Toma de Razón de la Contraloría.

La normativa busca proteger la calidad de los cielos nocturnos para la observación astronómica y se extiende a todo el territorio natural no  sólo a las regiones de Antofagasta, Atacama y Coquimbo, los cuáles constituyen un verdadero laboratorio natural para el desarrollo de esta ciencia”, expresó Sonia Reyes, Seremi del Medio Ambiente RM.

En la oportunidad también se presentó la “Guía para una iluminación amigable con aves marinas en Chile”, documento elaborado por la Red de Observadores de Aves (ROC), Oikonos y la OPCC, y que contó con el patrocinio del MMA.

La Guía está dirigida a desarrolladores de proyectos, tanto públicos como privados, que contemplan iluminación exterior en alguna de sus etapas o instalaciones. Este texto también está orientado a quienes, en sus diversos roles públicos y privados, deben evaluar o ser contrapartes de estos proyectos para velar por su correcto diseño e implementación. Asimismo, puede ser útil a profesionales que se desempeñan en servicios públicos que tienen injerencia sobre la planificación territorial en sus diferentes escalas, como municipios, gobiernos regionales y ministerios sectoriales.

“Se espera que esta guía sea un instrumento útil para actores públicos y privados en el desarrollo de proyectos en zonas sensibles con aves marinas, en sintonía y complementando la nueva norma de emisión. De este modo, se busca evitar al máximo el impacto de las luces artificiales en este grupo de aves amenazadas”, explicó Ivo Tejeda, director ejecutivo de la ROC.

En tanto, el gerente de Programas de la Fundación San Carlos de Maipo, Raúl Perry, a cargo de la conservación del humedal Laguna de Batuco -que desde el año 2021 fue declarado Santuario de la Naturaleza, permitiendo que 274 hectáreas del espejo del agua quedaran bajo protección oficial de Estado de Chile -destacó que la actividad se haya realizado en este sitio protegido, donde se han ocupado de mantener “un acceso gratuito, libre y seguro del ser humano, protegiendo a la flora y fauna de perros, cazadores o de personas que botan basura. El fin es que las personas puedan conocer la laguna sin afectarla, aprendiendo a conocerla, a quererla y a cuidarla”. 

Antecedentes sobre el impacto de la Contaminación Lumínica en Aves Migratorias

Según datos, actualmente en nuestro país existe casi una veintena de especies afectadas por la contaminación lumínica, las que se distribuyen entre diversas islas del Océano Pacífico, localidades costeras de Chile e, incluso, localidades ubicadas a más de 100 kms de la costa.

Entre las especies más afectadas se encuentran la Golondrina de Mar Negra y la Fardela Blanca, ambas clasificadas en la categoría de conservación “En Peligro”, identificándose como principal amenaza la contaminación lumínica o luminosidad artificial que, en el caso de la Golondrina, cuenta con registros de caídas que superan los 13.000 especímenes al año.

En este contexto, el Ministerio del Medio Ambiente elaboró los Planes de Recuperación, Conservación y Gestión de Especies (RECOGE) para la Fardela Blanca y la Golondrina de Mar del Norte. Dichos planes buscan proteger a estas especies de sus amenazas, como la contaminación lumínica.